Cap. Supervivencia Fénix

Como de costumbre, los chicos Ultimate estaban de nuevo en Darkstrong. Entonces, Mav y Natalie salen al jardín del reino juntos cuando inesperadamente, antes de que ambos se besaran, Mav recibe una llamada entrante del bando a través de su pulsera. Él la atiende de seguida y al parecer se trataba de la bruja Malévora, la cual apareció en forma de holograma para avisarles de que algo trágico estaba ocurriendo en Phoenix-land, el planeta del Fénix.

--- Mav, Natalie, he de deciros algo, será mejor que os preparéis... Al parecer, algo ha sucedido en Phoenix-land. El Fénix parece estar en peligro, deberíais ir cuanto antes. Vale, ahí os lo dejo, es todo.--- comentó la bruja con algo de sarcasmo al decir la última frase.

---¿Cómo? Yo soy guardiana, conseguí mi transformación fénix allí, no creo que sea esta nuestra misión para ir de nuevo, aunque el fénix corre peligro...--- añadió Natalie extrañada a la vez que preocupada por la situación.

--- ¿Ah, no? ¿Y qué se supone que debemos hacer entonces, Natalie?--- cuestionó Mav muy confuso.

--- Pues creo que deberíamos decírselo a quienes verdaderamente debiesen conseguir esta misma transformación... Mi hijo y sus amigos, ellos lo lograrán, estoy segura.

--- Bueno, está bien vayamos y digámoselo a ellos.---le contestó Mav luego.

Mav y Natalie se dirigieron hasta donde los chicos Ultimate, y Natalie se encargó de explicarles la situación a su hijo y compañía.

--- Veréis chicos, es muy importante y sería totalmente maravilloso que la consiguiérais. Es increíblemente alucinante, y os dará un gran poder como guardianes que sois que os convertirá en inmortales. Recordad esto: 'Un fénix nunca se rinde, se levanta cada vez que es derrotado'.

Tras esto, los chicos se dirigieron a Phoenix-land, pero antes contactaron con Malévora a través de la pulsera maléfica de Dave.

--- Haber... Tenéis que trasladaros a Phoenix-land. Una vez allí, tenéis que salvar al fénix, conseguir vuestro don, bla, bla, bla...---les explicó la bruja muy desganada.

---¿Cómo que bla, bla, bla? Chicos, no sabemos ni cómo llegar,¿y nos dice bla, bla , bla? Cómo si ya lo supiéramos, es que... ¡Qué esaboría es, vaya!--- dijo Lacey vaciladamente.

--- ¡Lacey, ya vale!---exclamó Dave.

--- Pero es que es verdad, Dave, joder vaya tipa.
 
--- Ja, ja, ja, joder si es que me es inevitable aguantar la risa contigo, Lace, ja,ja--- volvió a decir Dave riéndose.

--- Chicos, ya está bien. Hemos venido aquí por una misión, por favor, dejémosno de cachondeo, ¿sí?.--- les llamó la atención Denniss.

Luego, fueron a por el fénix, pero Lacey no paraba de cachondearse de algunas cosas y por más que le pedían silencio, ella no podía evitar reírse, sobretodo cuando vio que uno de los rivales a los que debían enfrentarse tenía la cabeza de su mayor temor, un sapo. Sí, temía a los sapos desde un día que se cruzó con uno de ellos, y pese al temor que tenía, y a la vez que se burlaba, al final se enfrenta a ellos tras ver a Dave casi derrotado por uno de esos enemigos 'cabeza-sapos'.

--- Oh, vamos Dave. No me digas que no tienen gracia estos enemigos.

--- Lo cierto, es que sí que tienes razón, Lacey es la leche je, je, pero debemos enfrentarnos a ellos.
 
---¿Sí o qué? Oh vamos, tampoco es para tanto... Ja, ja, sí creo que sí lo es. Bueno dejemos ya la coña.---comentó Walter.

Los chicos se enfrentaron a esos raros enemigos, los cuales eran muy poderosos y en uno de los ataques, Dave resultó gravemente herido, sus alas desaparecieron en llamas y su espalda quedó totalmente ensangrentada.

--- ¡AHHH!--- Gritó dolorido tras el impacto.

--- ¡Vamos, tenemos que ayudarle!---exclamó Denniss a continuación.

--- ¡Espera, Denniss! Debemos de liberar al fénix.--- le dijo Walt.

Denniss, Walter y Mayela aunque al final también Lacey, fueron a liberar al fénix, mientras Dave trataba de no darse por vencido intentando no caer. Permanecía a gatas aunque inmóvil en el suelo, tratando de recuperarse con la respiración muy acelerada, pero se sentía demasiado dolorido. Así que una vez liberado el fénix, Dave trató de seguirle con la mirada hasta hacer venir al fénix ante él...