Cap. El preso y la princesa, (Día 1):

Día 1:

Lacey aún parecía algo preocupada por su amiga Sum después de que ésta hubiese sido arrestada días atrás por el asesinato que cometió hacía 11 años.
Pero Lacey se sentía algo nostálgica. Aún así, decidió decírselo a Dave y aunque éste también la extrañaba, le dijo que fuese a verla cuanto antes al menos para comprobar que estuviese bien.

--- Oh Dave, lo cierto es que aún me siento algo culpable por lo de Sum. Me cuesta hacerme a la idea de que no la veremos durante un mes. Ahora entiendo lo eterno que debe ser para ella. Tengo una idea, ve a verle y mira si se encuentra bien, ¿sí?

--- Bueno, yo pensaba ir más tarde pero está bien, iré ahora a ver cómo está.

--- Gracias Dave, eres un amor.--- le dijo Lacey mientras le besaba en la mejilla.

Luego, Dave fue a ver a Sum a las mazmorras donde se encontraba con su compañero de celda Jerard, el cual parecía algo ilusionado por conocer al ídolo de ésta, Dave, mientras ella le sobresaltaba desconfiada.

--- Bueno, princesa, ¿hoy por fin conoceré a tu ídolo o qué?

--- Pues puede ser si es que viene luego, oye ¿y por qué tantas ganas en conocerle?--- le cuestionó extrañada.

--- Solamente quiero agradecerle la suerte que tiene en haber conocido a alguien como tú, princesa, nada más.
 
--- En serio, deja al menos de llamarme princesa, ¿no? Entiendo que lo sea, pero tampoco es para tanto.
 
--- Oh, vamos princesa. Ya te lo he dicho: no pienso llamarte por tu nombre, ni por el falso, para mí siempre serás princesa, porque lo eres, y además no te acostumbres mucho a esta forma de ser mía, no con todos soy así, princesa, así que deberías estar agradecida por ello.

--- ¿Agradecida yo? ¿Contigo, alguien que apenas conozco de unos días?--- cuestionó vaciladamente.

--- Tienes razón, princesa, no deberías fiarte de mí. ¿Pero por qué eres tan desconfiada? Pues tendrás que confiar más en mí. Te recuerdo que aún te queda un mes a mi lado.

--- Sí, todo un mes aguantándote a ti y a tus chorradas.--- añadió resoplando muy seriamente.

--- Pues no te queda otra, princesa.

De pronto, aparece Dave por las mazmorras, lo que provoca que al escuchar sus pasos, Sum se alertase algo inquietante.

--- Parece que ya está aquí.

---¿Quién, princesa, es tu ídolo?

--- Sí, creo que es él. Reconozco sus pasos.
--- ¡Dave!--- añadió impresionada.

--- Hola, Sum, ¿cómo te encuentras?

--- Bien, estoy bien. 

--- Hola, soy Jerard. ¿Qué tal, Dave? Encantado de conocerte, ya tenía ganas yo de conocer al afortunado de tener a alguien como mi compañera, ¿no, princesa?
 
--- Sí, bueno. Perdónale, no sé que le pasa que no deja de llamarme princesa todo el rato. Por más que le he dicho que me llame por mi nombre, no hay manera, Dave.

--- No pasa nada. Bueno me alegro que os encontréis bien, yo ya me voy.

--- Pues adiós, Dave.

---Adiós Sum. Adiós Jerard.

--- ¡Adiós Dave, todo un placer!
 
Después de despedirse, Dave les dijo a todos incluido a Mav que Sum parecía encontrarse bien, y luego se fueron éstos a War Of Singles. Mientras tanto, Jerard empezó a interesarse más por Sum preguntándole sobre cómo conoció a su ídolo.

Ella al final accede y termina contándoselo, hasta que decide encender la pequeña televisión que
había en la celda en la que estaban para mostrarle que todo lo que le decía sobre Dave era cierto.

Finalmente, Sum intenta averiguar sobre lo que le ocurrirá en esos días que le quedaban antes de poder ser libre, pero se queda totalmente impactada al descubrir cómo podría acabar la historia entre Jerard y ella, de lo que parecía renegarse constantemente.

--- ¡No, no es posible! ¡Eso no es verdad, no puede ser!--- exclamó muy estupefacta.

--- ¿Qué pasó, princesa?--- preguntó intrigado.

--- Deberías ver esto, aunque te aviso de que estoy totalmente segura de que eso es muy poco probable de que suceda.

Sum le muestra el holograma del cómo podría acabar la historia entre ellos, y él también se asombra al ver que al final podría acabar mejor de lo que esperaba, aunque verdaderamente Jerard sí estaba enamorado de ella...